Cientos de migrantes protestan en el sur de la Florida contra ley del gobernador.
La ley SB 1718 entrará en vigor el próximo 1 de julio y, entre otras cosas, obliga a las empresas utilizar el sistema de verificación de estatus legal y castiga con hasta 15 años de prisión a quienes transporten indocumentados a la Florida.
HOMESTEAD, FLORIDA, EEUU — Hace dos años que Baltasar, de 28 años, dejó su Guatemala natal para emprender una nueva vida en Estados Unidos. Hizo una peligrosa travesía hasta llegar a la frontera sur con México, donde cruzó ilegalmente por un lugar de Texas. Después se instalaría en Homestead, una región del sur de la Florida donde hay una gran comunidad migrante que trabaja en el campo principalmente.
Ahora trabaja para una compañía de mantenimiento agrícola y dice estar satisfecho con su nueva vida, a pesar de estar lejos de su familia. Pero las cosas podrían cambiar en cuestión de semanas después de que entre en vigor la ley SB 1718, prevista para el 1 de julio, que promulgó el gobernador de la Florida, el republicano Ron DeSantis, contra la migración irregular.
La ley prohíbe contratar a indocumentados
La ley obliga a las empresas de más de 25 empleados a utilizar el sistema E-Verify para certificar que los empleados tiene un estatus migratorio válido y que pueden trabajar legalmente. En caso de que las autoridades intercepten empleados sin papeles, la empresa se enfrentaría a multas de 1.000 dólares diarios, según el documento de la propuesta legislativa.
Baltasar en uno de los 700.000 migrantes indocumentados que se calcula que viven en la Florida, según el Instituto de Políticas Migratorias. Durante una breve conversación con la Voz de América, el joven se mostraba disconforme con la medida impulsada por el ahora aspirante presidencial.
“Venimos a levantar este país”
“Se ve un poco mal porque está poniendo cargas sobre nosotros, que no somos delincuentes. No nos merecemos esta ley”, explica Baltasar recordando que la mayoría de los migrantes que vienen a Estados Unidos lo hacen “para trabajar y levantar este país”.
Además, advierte de las consecuencias negativas de esta ley, porque muchos productos que se siembran en los campos de Homestead luego se distribuyen en numerosos estados del país y que muchos trabajadores sin papeles ya están pensando en dejar el estado.
“Si él decide poner esta ley, todos se van a ir y todo se va a ir para abajo. Nada va a ser igual y todo va a terminar”, asegura.
Reclaman “piedad” a DeSantis
Él es uno de los migrantes indocumentados que regularmente se concentran frente a las instalaciones del ayuntamiento de Homestead para protestar por esta medida. Este fin de semana, cientos de migrantes se concentraron con carteles y cánticos contra la ley SB 1718 y reclamando a DeSantis “un poco de piedad por los indocumentados que trabajan duro por este país”.
“Es bien importante que nos unamos. En la unión está la fuerza. Todos los inmigrantes debemos unirnos y luchar para tratar que el gobernador y los congresistas revoquen esta ley que criminaliza a los inmigrantes que tanto contribuyen a la comunidad”, decía Yanet Galvis, una activista venezolana de la Coalición Inmigrante de la Florida (FLIC, en inglés).
“Estoy pensando en irme, incluso de Estados Unidos”
Billy López es otro guatemalteco que lleva 15 años viviendo aquí. Ha pasado gran parte de su vida en esta zona de Estados Unidos, sus hijos son estadounidenses y ahora teme que en cualquier momento lo puedan parar las autoridades y tener una orden de deportación “simplemente por no tener papeles”.
“Muchos de nosotros tenemos mucho miedo a medida que se acerca esta fecha, no sé qué hacer, me planteo irme a otro estado a empezar de cero, pero las rentas están por las nubes. Aquí al menos tengo gente que me pueda ayudar, pero si veo que las cosas no se dan como espero, incluso me plantearía la opción de regresar a Guatemala”, confesó.
De acuerdo con datos facilitados por el MPI, se estima que unos 455.000 migrantes indocumentados están trabajando en la Florida. De esos, el 24 % trabaja en la construcción, el 17 % en tareas administrativas o del hogar, el 15 % en el área de servicios de comida, el 9 % en tiendas y el 8 % en otros servicios.
El gobernador de la Florida: “Es una ley para luchar contra el tráfico humano”
El gobernador de la Florida, que la semana pasada anunció formalmente su candidatura a las primarias por el partido republicano para las elecciones presidenciales de 2024, asegura que esta ley tiene como finalidad luchar contra el tráfico humano y hacer frente a “los efectos negativos” de las políticas implementadas por el gobierno del presidente Joe Biden en la frontera con México tras el fin del Título 42 y la reposición del Título 8, que obliga a las autoridades a seguir las normas sobre los procesos de solicitud de asilo.
“En la Florida, reconocemos esto desde el día uno y hemos actuado realmente desde que (Joe Biden) asumió el cargo para combatir los efectos negativos de su política fronteriza”, dijo recientemente tras firmar la ley SB 1718 y defender que “nadie tiene derecho a emigrar a este país, ningún extranjero”.
Hasta 15 años de prisión por transportar a un indocumentado
Otro de los puntos que ha generado una gran preocupación, también entre los residentes legales, es que la ley contempla castigos por la vía penal para aquellas personas que transporten indocumentados hacia el estado de la Florida. Se contemplan penas de 10 años de prisión para quienes transporten adultos sin papeles y hasta 15 años de prisión si hay menores.
“Si tuviera delante al gobernador le diría que no está bien lo que está haciendo, que si él tiene familia que piensa en sus hijos, que quizás lo tienen todo, pero que hay niños que no lo tienen todo y que solo quieren superarse en este país”, concluía María Chávez, una mexicana residente en Homestead que tampoco tiene papeles.