El presunto autor de la filtración de documentos del Pentágono permanece en prisión.

Los defensores públicos pidieron al juez que retrasara por dos semanas la audiencia que debe decidir si el filtrador, Jack Teixeira, debe permanecer detenido hasta que haya una sentencia.

El integrante de la Guardia Nacional Aérea de Estados Unidos que enfrenta cargos penales por filtrar registros de inteligencia militar de alto secreto a un grupo de amigos en un sitio web de jugadores continuará en la cárcel ya que su audiencia de detención se retrasó el miércoles dos semanas.

El sospechoso, Jack Teixeira, de 21 años, fue arrestado la semana pasada por agentes del FBI fuertemente armados en la residencia de su madre en North Dighton, Massachusetts, y tenía programada una audiencia en Boston el miércoles.

La audiencia tenía como objetivo determinar si debería permanecer detenido mientras esperaba el juicio por dos cargos de copiar y tomar documentos clasificados de la base aérea de Cape Cod donde trabajaba y luego enviárselos a sus amigos en el sitio de redes sociales Discord, posiblemente para impresionarlos con su acceso a material sensible.

Los investigadores dicen que creen que Teixeira pasó los documentos a sus amigos creyendo que no se difundirían más allá del grupo. Pero uno de sus amigos compartió el material con una audiencia más amplia y los documentos se difundieron rápidamente en todo el mundo a través de las redes sociales.

El material clasificado, según versiones de noticias de EEUU, revela el espionaje de Washington a amigos y enemigos en todo el mundo, las evaluaciones estadounidenses de las fuerzas militares rusas y ucranianas y la creencia de que la fuerza aérea china tiene una clara ventaja sobre la defensa militar de Taiwán, el territorio insular democrático que Beijing afirma que es parte de China continental.

Las autoridades con información sobre la investigación han dicho que al joven grupo de amigos vinculados a Teixeira le gustaba jugar juegos de guerra en línea y estaba muy interesado en temas de armamento y equipo militar.

Los fiscales federales en el caso le dijeron al juez federal David Hennessy que tenían la intención de solicitar la prisión preventiva de Teixeira. Sin embargo, unas dos horas antes de la audiencia, el equipo de defensores públicos federales de Teixeira presentó una solicitud pidiendo al juez que retrasara la audiencia de detención por dos semanas porque necesitaban “más tiempo para abordar los problemas presentados por la solicitud de detención del gobierno”. Hennessy estuvo de acuerdo con la demora.

No estaba claro si Teixeira optará por impugnar la solicitud de detención del gobierno, pero en EEUU, los acusados de alto perfil a menudo son encarcelados en espera de juicio.

El miércoles por la mañana, Teixeira fue llevado a la sala del tribunal esposado y con el uniforme naranja de presidiario mientras renunciaba a su derecho a una audiencia preliminar. No dijo nada más allá de responder sí y no a las preguntas sobre si entendía sus derechos y el procedimiento.

Las autoridades dicen que los documentos filtrados en el centro del caso constituyen la violación de seguridad más grave de Estados Unidos desde que aparecieron más de 700.000 documentos, videos y cables diplomáticos en el sitio web de WikiLeaks, en 2010. El Pentágono calificó la filtración de la base aérea de Massachusetts, en el noreste Estados Unidos, como un “acto criminal deliberado”.

Una denuncia penal que se hizo pública el viernes acusa a Teixeira de un cargo de violación de la Ley de Espionaje relacionado con la copia y transmisión ilegales de material de defensa sensible, y un segundo cargo relacionado con el traslado ilegal de material de defensa a un lugar no autorizado.

Los expertos legales dicen que Teixeira podría enfrentar más cargos a medida que se presenten pruebas adicionales ante un gran jurado.

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